Originalmente se pensaba que la alianza PAN-PRD y quizás Convergencia, se podría formalizar en los próximos días ya que debe registrarse a más tardar en el Consejo Estatal Electoral el 21 del presente mes de enero, sin embargo, los últimos acontecimientos nacionales en las cúpulas del PRD, hacen pensar que la alianza PAN-PRD no será viable en el estado de México en virtud de la férrea oposición del gurú de la izquierda Andrés Manuel López Obrador, quien autoritario y mesiánico, como ha sido siempre, logró imponer en el PRD la candidatura de su incondicional, el diputado Alejandro Encinas, quien acorde a las instrucciones de su patrón, ha manifestado en principio que no aceptará ser candidato de una alianza con el PAN, por lo que es muy posible que la citada alianza PAN-PRD en el estado de México se convierta en un sueño guajiro, gracias al autoritarismo y cerrazón de López Obrador, quien prefiere que los tricolores ganen de nueva cuenta las elecciones en esta importante entidad, antes que reconocer y aceptar, que al igual que en otros estados como Puebla, Oaxaca y Sinaloa; la única forma de derrotar los cacicazgos tricolores, es con una alianza PAN-PRD; sin duda el estado de México no será la excepción, pero el ego y la soberbia de Andrés Manuel no conocen limites, a pesar de lo que ocurrió en el 2006, persiste en la confrontación y radicalismo en lugar de buscar la consolidación y la unidad en torno a un proyecto de gobierno plural, sigue con su misma actitud sectaria y excluyente de “YO O NADIE” o “EL ESTADO SOY YO”; lo cual es una lástima por tratarse de uno de los más grandes liderazgos de México en la actualidad, que si aceptara aliarse con los azules, podría volverse un autentico factor de cambio y transformación social para beneficio de la mayoría de los mexicanos; pero en las actuales condiciones políticas, su actitud radical y divisionista sólo servirá, aunque de manera involuntaria, para consolidar en el poder al PRI, ya que perderán la posibilidad de ganar las elecciones en la entidad más importante que es el estado de México con casi 10 millones de votantes; convirtiéndose así Andrés Manuel en aliado de Peña Nieto.
Lo anterior, hace que la alianza PAN-PRD en Nayarit también se tambalee si las cúpulas nacionales del PAN deciden no ir en alianza con el PRD en el estado de México con Alejandro Encinas a la cabeza; en Nayarit podría repetirse el escenario y dividirse también la oposición yéndose por separado el PAN y el PRD, con distintos candidatos, esta división sin duda también beneficiará al tricolor, que podría ganar con cierta facilidad si Martha Elena no encabeza la alianza en cuestión.
Así pues, difiero un poco de la opinión de que la candidatura de Encinas beneficie a Martha Elena, porque si no se dá la alianza PAN-PRD en el estado más importante y emblemático para el PRI, por ser el feudo de su seguro candidato presidencial Peña Nieto, mucho más difícil será en Nayarit, que sólo representa el 0.8 por ciento de la votación nacional con poco más de 700 mil electores en el padrón; mientras las cúpulas de los partidos de verdadera oposición PAN y PRD sigan sin tener la audacia, inteligencia y capacidad de anteponer los supremos intereses de la sociedad por encima de sus respectivos grupos, seguiremos en manos de los mismos que han saqueado al país por 80 años, así será en el estado de México, en Nayarit y en el 2012 con el regreso de Carlos Salinas de Gortari como poder detrás del trono si Enrique Peña Nieto gana la presidencia de la República, lo cual no es nada difícil como van las cosas; en particular por lo que se refiere a la inseguridad, la pobreza y el desempleo, que son problemas que no se han podido solucionar, o al menos reducir.
A los Nayaritas nos preocupa que el actual cacique consolide su maximato si por desgracia para todos vuelve a ganar el partido tricolor, no porque sus aspirantes sean todos malos, sino porque al ser del mismo color, tendrían que proteger al actual virrey, encubriéndole todas sus trapacerías, despilfarros y abusos, tendrían que justificar el desmedido e irracional endeudamiento, la inseguridad, la violencia que campea en el estado y el caos administrativo, es decir, sería un gobierno de borrón y cuenta nueva.
Solamente un gobierno plural de oposición podría garantizar un verdadero cambio en el estado, con políticos y funcionarios capaces y honestos, o menos corruptos. Nayarit no podría aguantar otro gobierno autista y rapaz como el actual, del color que sea no importa; sólo que sea mejor o menos malo, lo cual no es difícil.
Los ciudadanos exigimos un gobierno que escuche al pueblo, que sea eficaz, con una administración eficiente y con un menor gasto burocrático, para lo cual debe reestructurarse el poder ejecutivo, es demasiado obeso y costoso, hay que suprimir dependencias inútiles que sólo generan gasto y puestos para los amigos casi siempre sin capacidad, perfil profesional ni experiencia en la administración, debe terminar el ejercicio discrecional del presupuesto al capricho del gobernante, así como los gastos suntuarios y de “promoción turística al extranjero”.
No creemos que ningún aspirante o gobernante priísta emprenda tales acciones ni siquiera en la campaña, aunque nos gustaría equivocarnos.
Por todo lo anterior podemos señalar que Martha Elena García es la figura política más abierta al cambio, por no tener compromisos políticos ni militancia en ningún partido, con la mayor presencia social y la disposición de hacer un gobierno plural, con la participación no sólo de los partidos políticos que la apoyen, sino de manera muy importante con los ciudadanos sin partido o sociedad civil, que son quienes en mayor medida le han mostrado su apoyo y simpatía y seguramente también le darán su voto el día de las elecciones.
Sin duda, Martha Elena lleva sobre sus espaldas una carga muy pesada, que es la de responder a la confianza del pueblo, que desea llevarla a la gubernatura como única esperanza de cambio y mejoría en los niveles de vida, con más salud, educación, empleo y seguridad en un ambiente de pluralidad y democracia, con absoluto respeto para todos las expresiones ciudadanas.
Ojalá que los partidos PAN y PRD además de Convergencia que de hecho ya la hizo, también la hagan su candidata para asegurar el triunfo electoral y que no se divida el voto de la oposición, que es a lo que le apuesta el virrey como única fórmula para hacer ganar a su partido. Esperamos que las cúpulas del PAN y PRD tengan la inteligencia y el sentido común necesarios para formalizar de inmediato una alianza triunfadora con Martha Elena a la cabeza, pues ella está decidida a participar y ganar las elecciones con el apoyo del pueblo aunque sea con un sólo partido, sin embargo ésta es una vía mucho más difícil. La historia y la experiencia demuestran claramente que al tricolores se le puede ganar solamente con una alianza lo más amplia posible.
¿Usted qué opina, amable lector