El desacuerdo entre Roberto Sandoval y Felipe Calderón, días antes de la supuesta visita del presidente Calderón a nayarit , en relación con la ampliación del CEFERESO del RINCÓN, cuyo cierre fué un compromiso de campaña del actual gobernador, que motivó además que el presidente cancelara su viaje a estas tierras, puede tener varias lecturas:
La primera nos muestra el rechazo, o desacuerdo del gobernador con la ampliación del CEFERESO, por ser un foco de inseguridad para los nayaritas en la opinión de mucha gente, lo que ocasionó que su cierre fuera una de las principales banderas de la campaña de Roberto Sandoval, sin embargo, también podría inferirse que este diferendo se dió como un riesgo calculado por el propio Roberto, pues los penales federales forman parte del programa nacional penitenciario (de seguridad) que es de orden estrictamente federal y que no está sujeto a negociación con las entidades federativas, en particular, después de llevar varios años funcionando, desde tiempos de Toño Echevarría, y de haber invertido más de mil millones de pesos en su construcción. Esta postura del gobernador podría interpretarse políticamente como un rechazo a la política presidencial de seguridad y un claro deslinde a favor de Peña Nieto con visión futurista.
Por otra parte, la actitud, quizá justificable de Roberto en términos políticos, podría ocasionarle problemas económicos a su gobierno en lo que resta del actual sexenio, pues no debemos olvidar que el estado se encuentra quebrado financieramente hablando, y que el 94 por ciento del presupuesto directo del estado es de carácter federal, es decir, que dependemos económicamente de la federación, sin contar las obras de infraestructura que corren completamente a cargo de la federación, sobre todo, resulta muy peligroso desairar al presidente si existe la posibilidad, que al parecer va en aumento, de un triunfo de Josefina Vázquez Mota en las próximas elecciones, aunque nosotros todavía pensamos que ganará Peña Nieto, dada la ignorancia y la falta de memoria histórica de los mexicanos.
Por otra parte, las declaraciones vertidas por el Secretario de Seguridad Pública Genaro García Luna, son dignas de reflexión; entre otras cosas expresó que la inseguridad no es provocada por el CEFERESO, sino por la corrupción de las instituciones policíacas del estado.
Aquí cabe mencionar que en otros estados, como Jalisco, existen penales federales de alta seguridad, p. e j. Puente Grande, y no se han disparado la violencia y el crimen organizado, como en Nayarit.
También hay que destacar que según señala la REVISTA NEXOS del mes de febrero del 2012 en un artículo de Eduardo Guerrero Gutiérrez, que en el año 2011, Nayarit ocupó el quinto lugar nacional en ejecuciones con 35.0 por cada cien mil habitantes, sólo superado por Chihuahua, Guerrero, Sinaloa y Durango, siendo el promedio nacional de 14.6 por cada cien mil habitantes, lo que nos ubica muy por arriba del doble del promedio nacional.
Por lo que se refiere a los municipios, Tepic ocupa en 2011 el décimo lugar entre los más violentos de México, con 219 ejecuciones, según la misma publicación.
Por otra parte, el secretario García Luna también declaró que solo el 25 por ciento de los mandos medios y operativos de la Policía Estatal habían realizado exámenes de confianza, y que sólo aprobó el 25 por ciento; así como también que los secuestros aumentaron en un 900 por ciento, y que de los 50 elementos del grupo de élite antisecuestros sólo se habían hecho exámen 4 elementos, uno de los cuales reprobó.
Sin duda estas declaraciones son muy graves y obligan al gobierno estatal a redoblar el paso en materia de exámenes de confianza, pues el compromiso del Acuerdo Nacional para la Justicia, la Paz y la Seguridad, compromete a todas las entidades a tener policías certificados al finalizar este año, independientemente de quien gane las elecciones el próximo mes de julio, pues lo que está en juego es la seguridad de todos los mexicanos.
Consideramos que pese a lo anterior, en el nuevo gobierno estatal existe una percepción de mayor seguridad que en el anterior “sexenio de la muerte”, sin embargo, es necesario cumplir con los compromisos en materia de seguridad para poder acceder a los apoyos de recursos federales en materia de equipamiento y capacitación que se distribuyen por medio del FOSEG o fideicomiso para la seguridad, que posibiliten que el estado de Nayarit tenga una policía estatal como la mejor de México.
Como conclusión; sugerimos al gobernador y a los funcionarios no pelearse con la cocinera, está de por medio la viabilidad financiera y el desarrollo de la infraestructura física, de salud y de educación en el estado, hay que llevar la fiesta en paz y que cada nivel de gobierno cumpla a cabalidad con la parte que le corresponde.
Todos los gobernantes al llegar al poder, deben olvidarse de su militancia y dedicase a servir de la mejor manera a todos los ciudadanos; a la inmensa mayoría y de los Nayaritas y de los mexicanos nos valen madre los partidos, que son en realidad mafias, lo que nos importa y exigimos, es que los gobiernos de cualquier color respondan a las necesidades de los ciudadanos y den solución a los grandes problemas sociales que son seguridad, justicia, salud, educación, empleo y desarrollo.
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