Al parecer, nuevamente comparecerá en fecha muy próxima el auditor general del Órgano de Fiscalización Superior, Lic. Salvador Iñiguez Castillo ante el congreso local para tratar de justificar lo injustificable y de proteger al sátrapa que lo impuso en su actual puesto; Ney M. González, el mayor depredador que ha nacido en Nayarit; con la protección que le proporcionan al ex-cacique los diputados tricolores y satélites del PVE M, bajo la dirigencia de su pastor, el también impuesto por Ney como presidente del congreso local Armando García, también ex-funcionario del SEXENIO DE LA MUERTE.
A pesar de los esfuerzos y sólidos razonamientos y argumentos de algunos distinguidos diputados del PAN, como Graciela Domínguez, Leopoldo Domínguez y Antonio Serrano, quienes sin duda serán mayoriteados por los diputados priístas y sus comparsas, porque para su vergüenza, los diputados tricolores, o la mayoría de ellos, están comprometidos con el depredador y corrupto ex-gobernador, pues le deben su curul y el pueblo no les importa, como lo han venido demostrando al no exigir en ningún momento transparencia ni cuentas claras, sin importarles la bancarrota del estado, ni el saqueo de los recursos del pueblo que sistemáticamente llevó a cabo Ney M. González y su pandilla durante todo el SEXENIO DE LA MUERTE.
Si los diputados tricolores tuvieran un mínimo de conciencia y sentido de responsabilidad ya estaría el perverso ex-gobernador sujeto a un juicio político, pero eso ya sabemos que ni en sueños ocurrirá.
Los datos duros y argumentos que ya han sido presentados por la diputada Graciela Domínguez y el diputado Leopoldo Domínguez, se obtuvieron del informe de auditoría emitido por el Órgano de Fiscalización Superior del Congreso del Estado sobre la Cuenta Pública Estatal de año 2010, y son entre otros, los siguientes:
1.- La Auditoría realizada fué sobre una muestra que ascendió a 1, 266. 88 millones de pesos, es decir, el 26. 6 por ciento del gasto público estatal directo del año 201, que fué de 4, 779.26 millones de pesos.
Sin embargo, el mismo informe de resultados de auditoría del OFS señala en su página 43, que al cierre del ejercicio 2010, quedó sin comprobar un importe de 1,170.06 millones de pesos, (ya incluídos en la muestra antes mencionada de 1,266.88 millones), del cual no se tiene evidencia alguna de su aplicación y destino, esta cantidad está integrada principalmente por tres partidas o cuentas que suman 1,000 millones de pesos y otras diez cuentas que suman 170.06 millones de pesos, de los cuales no se sabe a quién beneficiaron, las fechas de los retiros, ni su aplicación o destino, todo ésto en perjuicio de la Hacienda Pública Estatal, es decir, del pueblo.
A pesar de lo anterior el OFS no aumentó el tamaño de la muestra o el alcance de la revisión, puesto que si se restan a la muestra determinada por la auditoria (OFS) los 1,170.06 millones que equivalen al 24.5 por ciento del total de recursos ejercidos de 4,479.24 millones, resulta que la revisión de auditoría se redujo a un 2 por ciento del gasto total, que a todas luces es un alcance absurdo e insuficiente para poder emitir un dictamen aprobatorio sobre el manejo de los recursos públicos en el 2010; para efectos de la auditoría realizada; de un total de 1.266.88 millones, resulta que se desviaron 1.170.06 millones es decir, el 92 por ciento, y sin embargo el OFS, ¡ aprobó la Cuenta Pública del 2010!, lo cual nos dice claramente que el OFS obró con extrema ineptitud, complicidad y negligencia al aprobar esa cuenta pública, y que los diputados que la aprobaron son el colmo del cinismo y de la corrupción, también dejaron en claro que les importa madre el pueblo de Nayarit y lo que pase con su patrimonio.
2.- Con el mismo Informe de Resultados de la Cuenta Pública antes mencionada, también se señala que incumplió siete de los once postulados básicos que son obligatorios para el registro contable adecuado de las operaciones financieras del gobierno estatal, violando también por consecuencia la Ley Federal de Contabilidad Gubernamental que los establece como requisitos.
Por lo anterior, resulta incongruente que el alcance que el Órgano de Fiscalización haya determinado para los Poderes Legislativo y Judicial sea de 31.8 y 32.9 por ciento respectivamente cumpliendo además con los postulados básicos, y en el Ejecutivo se revisó el 26.5 por ciento, incluyendo dentro de este porcentaje los 1,170.06 millones cuya aplicación y justificación son inexistentes, con lo cual el alcance de la revisión de este último poder se redujo a un insignificante 2 por ciento, y además incumplió con los postulados básicos, que no son otra cosa que los requisitos mínimos para el registro de las operaciones financieras del gobierno estatal.
En virtud de lo antes expuesto, el resultado de la revisión de la cuenta pública del 2010, debió haber sido un DICTAMEN NEGATIVO, o por lo menos, UNA ABSTENCIÓN DE OPINIÓN; sin embargo, a pesar de la evidencia encontrada por el mismo Órgano de Fiscalización, tuvieron el cinismo y la desvergüenza de señalar textualmente “el Órgano de Fiscalización Superior del Estado de Nayarit considera que, en términos generales y respecto de la muestra antes señalada, el Poder Ejecutivo del Estado de Nayarit, cumplió con las disposiciones normativas aplicables al registro e información contable y presupuestaria, transparencia del ejercicio, destino de los recurso, obra pública, adquisiciones, arrendamiento y servicios”.
Lo anterior deja al descubierto la complicidad y parcialidad del Órgano de Fiscalización y la deshonestidad, corrupción y la impunidad del autócrata que nos hundió y condenó a más de 20 años de precariedad y pobreza a las finanzas estatales, a la inseguridad, falta de desarrollo, y a la desconfianza del pueblo en los políticos y gobernantes.
Tristemente, a pesar de todos las evidencias y pruebas, estamos seguros que el perverso sátrapa que nos desgobernó seguirá impune disfrutando de los miles de millones de pesos que le robó al sufrido aguantador y pueblo Nayarita.
Las situaciones antes comentadas ponen de manifiesto la necesidad de que el Órgano de Fiscalización Superior sea dotado de autonomía frente al Legislativo y al Ejecutivo y se ciudadanice, es decir, se integre por profesionales capaces y sin militancia partidista.
Ojala sea pronto la comparecencia del auditor general.
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