Como ya hemos dicho en muchas ocasiones, los tricolores arrasarán en
Nayarit a la oposición, por su mejor organización, estructura electoral, por el
apoyo político y económico del gobierno del estado, pero más importante qué lo
anterior, por el empequeñecimiento de la oposición en el estado representada
por el PAN y el PRD, quienes con las pugnas internas y por la mediocridad de
sus dirigentes estatales le han facilitado el camino del triunfo a la
oposición, particularmente el PAN que no supo conservar y apoyar a dos de sus
mejores gallos, Ivideliza Reyes y Amado Rubio, quienes con toda razón al ver la
conducta de su dirigencia, advirtieron que no tendrían respaldo político ni
económico y serían, en el mejor de los casos abandonados a su suerte, no
quedándoles más opción que renunciar a sus respectivas candidaturas para no
sufrir una enorme derrota.
Así pues, el PAN solamente tendrá los votos que le den Martha Elena
García para el senado, y en caso de los diputados los que pueda obtener Ángel
Castro por el segundo distrito (Tepic) ; así como los que le pueda dar su
candidata presidencial Josefina Vázquez Mota, que no nos parece que serán
muchos ; las candidatas azules como Guillermina Dueñas y Erika Camberos, son en
realidad personas desconocidas hasta en el PAN, que muy poco votos podrán
obtener, carecen de presencia social, de estructura y de recursos para hacer
una campaña decorosa.
Pero por si ésto fuera poco, el candidato azul por el primer distrito
será el nefasto e intrigante Carlos Hernández Ibarría, el talibán, este sí,
ampliamente conocido por demagogo, mentiroso, acomodaticio, quien ya como
diputado local demostró su ineptitud, complicidad y valemadrismo desde que el
perverso reyezuelo, Ney González impulso una ley mordaza, reformando el código
penal del estado para coartar la libertad del expresión, sin que el ínclito
talibán elevara su voz en el Congreso para evitar ese atropello, ni para votar
en contra. Creemos que este pésimo
candidato no sólo no le dará al votos al PAN, sino que se los dará al PRI o al
PRD, dado el repudio que despierta su persona entre quienes lo conocen, experto
como es, pero en dividir y enfrentar a sus correligionarios, como lo hizo
cuando fué de los principales “ESTRATEGAS” de la campaña de Martha Elena
García.
Por parte del PRD, aunque tiene buenos perfiles para algunas
candidaturas, como Ernesto Navarro y Nayar Mayorquín en la fórmula para el
senado, y a Francisco Xavier Castellón para el primer distrito, el
posicionamiento de su partido frente al electorado desde las pasadas elecciones
de julio del 2011 ha ido a la baja, lo cual casi le asegura el tercer lugar en
la elección, a no ser que Andrés Manuel
López Obrador se reposicione y mejore su presencia y aceptación entre los
votantes nayaritas, en cuyo caso, podrían pelear el segundo lugar a los azules,
lo cual no se ve fácil, aunque no es imposible.
Lo único seguro es que gracias a la campaña de televisa desde hace
casi seis años y hasta la fecha, con un costo de miles de millones de pesos,
Enrique Peña Nieto tiene el triunfo asegurado, muy a pesar de su impreparación
y todos sus defectos, pues, como bien dice Héctor Tajonar en el Milenio Diario
de hace pocos días, en su carta de renuncia a este diario ; “LA TELEVISORA
(TELEVISA) Y EL CANDIDATO TRICOLOR CONSTITUYEN UN BIONOMÍO POLÍTICO – ELECTORAL
INDIVISIBLE Y, PARA MUCHOS INVENCIBLE. LOS CONCESIONARIOS DE TELEVISIÓN HAN
PASADO DE SER SOLDADOS DEL PRESIDENTE A INVENTORES DE PRESIDENCIABLES”.
Así pues, como alguna vez dijera Karl Popper: “la televisión se ha
convertido en un poder político colosal, el más importante de todos”.
Nada o casi nada cuentan la preparación, la presencia social, el
arrastre popular o la capacidad de la persona, si no tiene el respaldo de los
medios televisivos, en particular de Televisa, que ejemplifica a la perfección
en México ese abuso del poder sin control ni respeto por las leyes electorales.
Como muestra de la falta de preparación del candidato tricolor y de
sus asesores políticos, está la negativa a participar en un debate televisivo
en el programa de Carmen Aristegui el día 25 de abril, en unión de los otros
candidatos: Josefina Vázquez Mota y Andrés Manuel López Obrador; mismo que
finalmente tuvo lugar con los coordinadores de campaña solamente.
No cabe duda de que Carlos Fuentes tiene toda la razón al decir que
los problemas de México son muy grandes para candidatos tan pequeños.
¿Usted qué opina, amable lector?
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