Las constantes declaraciones cantinflescas de nuestros políticos y funcionarios al servicio del virrey nos causan mucha risa por su incongruencia y su falta de sentido común particularmente porque exhiben la ignorancia y servilismo de los actores involucrados en esta tragicomedia en que se está convirtiendo el actual gobierno del estado. Veamos algunos ejemplos:
El versátil Secretario General de Gobierno, Dr. Roberto Mejía hace temerarias y absurdas afirmaciones como; “El estado de Nayarit es de los más seguros y tranquilos del país”; en ese momento se produce una balacera en diferentes rumbos de la ciudad de Tepic, muriendo asesinado un comandante de la policía estatal y heridos varios agentes policiacos, al día siguiente, ejecutan a un comerciante en ciudad del valle, todos estos hechos a plena luz del día, menos mal que somos un estado seguro, ¿verdad?. Al día siguiente, el mismo funcionario afirma, como siempre, sin saber, que el dinero recaudado se ha invertido en las grandes obras realizadas por el gobierno estatal en todos los órdenes, se debe a los recursos obtenidos a base de préstamos; ¡qué fácil!; lo dice todo y nada, de ser cierto esto; ¿para qué le han servido al gobierno los ingresos de la federación y los propios del estado?; según sus amplios conocimientos financieros, ¿solamente se puede desarrollar un estado endeudándolo?. De ser así, ¿Cómo se pagan las deudas?; ¿es válido dejarlo hipotecado durante 20 o 30 años?. Los gobiernos anteriores que no dejaron endeudado al estado; ¿no hicieron nada?. A su saber y entender Don Roberto; ¿los gastos multimillonarios en imagen, medios de comunicación escritos y electrónicos, los viajes principescos al extranjero, los pagos a los monopolios televisivos; ¿son parte del desarrollo?; ¿el hecho de endeudarse sin control ni fiscalización es desarrollo?, ¿le corresponde al gobierno de Nayarit la promoción del turismo del país?, ¿el gobernador de Nayarit ya es también secretario de turismo federal?.
El crear dependencias burocráticas inútiles y costosas como la Secretaría de Desarrollo Social, la Secretaría del Trabajo, la Secretaría de Seguridad pública, los diez nuevos aviadores-magistrados del poder judicial impuestos por el virrey, con todo el millonario gasto que eso implica en sueldos de funcionarios y gastos administrativos, en tiempo de recesión; ¿son a su juicio desarrollo?
De ser así, sin duda seriamos el estado más desarrollado y rico del país, sin embargo, resulta que somos el sexto estado más pobre de la república; luego entonces ¿Dónde están el progreso y el desarrollo de Nayarit fuera de la cacareada Riviera Nayarit que es lo único que interesa al gobernador?
Hay que recordarle al Sr. Secretario General que la deuda debe ser invertida en obras y servicios públicos de beneficio general, no en culto a la personalidad, y además debe ser moderada y limitada por la Ley de Deuda Pública, que en nuestra entidad es auténticamente letra muerta, ya que no contempla topes de endeudamiento, ni plazos máximos de pago, como en muchas entidades progresistas de la república (12 para ser exactos).
Otro empleado del gobernador, pero que cobra como representante popular es Don Manuel Narváez además presidente del Congreso del Estado, quien hace gala de su ignorancia y sumisión al ejecutivo, al decir que no sabe a ciencia cierta cuál es el importe de la deuda pública.
Lo peor del caso es que el Congreso del Estado es la instancia que en teoría aprobó el endeudamiento, entonces, esto quiere decir que los levantadedos (diputados) de todos los colores al servicio del gobernador ni siquiera se molestan en saber lo que aprueban, llámese deudas o impuestos, pues ya saben que el pueblo no cuenta para nada y que su jefe el gobernador los recompensa muy generosamente con dinero o con huesos políticos.
Así pues, la ignorancia e indolencia de funcionarios y diputados tiene como consecuencia lógica la existencia de un sólo poder absoluto y omnipotente en Nayarit, en la persona del gobernador, quien a base de mentiras y verdades a medias, puede hacer posible la construcción de un nuevo cacicazgo transexenal a partir de la imposición de un gobernador títere emanado del partido tricolor para el 2011, para garantizar los privilegios y poder del actual gobernante y que podría ser el acelerado presidente municipal Roberto Sandoval o el Senador Raúl Mejía.
Como ya lo hemos dicho, y lo ha precisado muy claramente el amigo Jorge Aguayo, nuestro estado tiene una deuda pública de más de 2000 millones de pesos; de 2149 millones para ser exactos, sin contar los más de 150 millones que indebidamente e ilegalmente está utilizando del Fondo de Pensiones del Estado, poniendo en riesgo no sólo su existencia, sino la viabilidad de las pensiones de la burocracia y magisterio estatal, y sin considerar tampoco otros 200 millones de préstamo directo y hasta 450 millones más con la garantía de los impuestos estatales que autorizaron para 2010 nuestros diputados al servicio del gobernador, que encabezados por el Diputado Narváez ahora fingen demencia al decir que no saben de cuanto es la deuda pública del Estado, con lo que al final del 2010, la deuda pública andaría muy cerca de los tres mil millones de pesos.
Adicionalmente, vale la pena insistir en que este gobierno del despilfarro y la demagogia ha recibido en 4 años de gobierno casi dos mil millones más que el anterior en todo su sexenio en participaciones y aportaciones federales, por lo que se pude concluír que si en realidad este dinero se hubiera aplicado en obras y servicios, sin duda Nayarit sería en verdad un Estado completamente diferente y próspero.
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