La corrupción e ineptitud del actual gobierno estatal, al parecer no reconoce limites, ahora hasta sus correligionarios le reclaman su actitud soberbia y arbitraria al interior de su propio partido, el PRI; la marcha del pasado día 5 de marzo sirve en primer lugar para demostrar que el cacique no tiene ya la aprobación y el apoyo de su propio partido, merced a las arbitrariedades y tropelías que ha cometido, y seguirá cometiendo para imponer, desde su candidato a la gubernatura que es su alma gemela, Roberto Sandoval, pasando por los candidatos a alcaldes y diputados locales, incluyendo a las lacras plurinominales, hasta los candidatos a las regidurías, en su afán de consumar su maximato transexenal para conservar en un puño el poder en el estado a través de un pelele en la gubernatura, otros en las alcaldías más importantes y en el congreso estatal.
También la marcha tuvo el propósito de establecer que el tricolor sigue siendo sin duda el partido más fuerte, pero siempre y cuando respeten los liderazgos y aspiraciones de los Senadores Gerardo Montenegro y Raúl Mejía, ambos sin duda mucho mejor preparados, capaces y experimentados que el delfín del gobernador; Roberto Sandoval.
Este deslinde de Gerardo y Raúl sin duda es acertado, sin embargo no es suficiente para que el pueblo olvide seis años de mentiras, demagogia, corrupción, endeudamiento irracional e injustificado para obras de relumbrón como los nudos viales, la ciudad de la salud, la ciudad de la ciencia, la ciudad satélite, la ciudad gótica, la ciudad peluche, etc; para enaltecer el ego de un gobernante, antes que solucionar problemas más apremiantes de los nayaritas, como la salud de cientos de miles que dependen de los servicios públicos estatales, cuyos hospitales carecen de los más indispensable en términos de instalaciones, médicos, enfermeras y medicinas, y los recursos federales por cientos de millones de pesos etiquetados para este rubro (salud), se desvían a los bolsillos del exsecretario Omar Reynoso, funcionarios de su confianza y hasta a su precampaña a la alcaldía de Bahía de Banderas, dejando sin trabajo a más de 200 trabajadores Nayaritas de la Secretaria de Salud.
También será my difícil para los tricolores justificar el actual clima de inseguridad y violencia propiciado por la pasividad, ineptitud y quizá corrupción de los cuerpos policiacos estatales y municipales, cuya ineficiencia ya ha costado casi 500 víctimas en un solo año, así como el terror de los Nayaritas que ya perdimos la tranquilidad y vivimos con el Jesús en la boca, a pesar de las cínicas declaraciones del autócrata, de que nos indignemos con la violencia, cuando su gobierno incumple con su principal obligación constitucional que es precisamente proteger la vida de los Nayaritas.
La frágil situación económica política y social del estado, demanda hoy como nunca, un gobierno honesto y eficaz, cercano al pueblo, que gobierne obedeciendo al pueblo y solucionando sus principales problemas; salud, educación, desarrollo, empleo, pero sobre todo seguridad.
El pésimo y nefasto gobierno actual sin duda será un factor importante para la derrota tricolor, pero siempre y cuando la oposición este unificada y con un liderazgo claro y confiable; en este caso, la alianza “Nayarit Paz y Trabajo”, PAN-PRD, debe postular a la única figura en el estado que puede hacer coincidir y conducir a la oposición, no sólo militantes de esos partidos, sino a la sociedad civil que, somos la mayoría, así como a muchos miles de priístas de buena fé que desean mejorar sus condiciones de vida y recuperar la seguridad y la tranquilidad en el estado; desde luego que nos estamos refiriendo a la diputada Martha Elena García, quien es una candidata ciudadana, que no milita en ningún partido, lo cual garantiza que no tiene filias ni fobias, es decir que gobernará para todos por igual, ya que no es parte de ninguna cúpula ni mafia partidista.
Por lo anterior, es importante que ya las cúpulas del PAN y PRD lleguen a acuerdos definitivos, que la gente sepa cuanto antes que Martha Elena será la candidata de la citada alianza, y que el diputado Acosta Naranjo, con su gran capacidad y talento político acepte apoyarla e ir juntos en este complicado y difícil proceso, la unidad de Naranjo y Carlos Carrillo a favor de Martha Elena, permitirá consolidar las estructuras electorales y de promoción en todo el estado con mayor fuerza, así como también convocar a liderazgos sociales y grupos de la sociedad civil para conformar un gran equipo, primero de campaña y después de gobierno sobre bases firmes y definidas.
Ya es tiempo de definiciones todos sabemos que Martha Elena tiene las simpatías y los votos de la gente, pero es indispensable también el apoyo del diputado Acosta Naranjo esto ya lo hemos señalado desde hace más de un año y sigue siendo claro y evidente que ella sigue y seguirá teniendo la mayor aceptación en la oposición. Ningún debate o consulta cambiarán esta situación.
¿Por qué no definir la candidatura de una vez para ganar tiempo y definir conjuntamente propuestas y programas?
¿Usted qué opina, amable lector?
