Los últimos acontecimientos políticos en el estado nos hacen pensar que la alianza PAN-PRD corre el riesgo de disolverse o desaparecer por la falta de cumplimiento de acuerdos celebrados el año pasado en el sentido de que la candidata o el candidato a la gubernatura seria postulado por ambos partidos con base en una o varias encuestas elaboradas por empresas de prestigio nacional.
Sin embargo, al paso del tiempo, el amigo Acosta Naranjo ha venido añadiendo más condiciones y requisitos para seleccionar al candidato, como fueron; debatir las propuestas entre los aspirantes; Martha Elena, y Acosta Naranjo, agregándose después a Carlos Carrillo Santana, que no estaba en el programa de los aspirantes a la gubernatura porque en el acuerdo inicial, pertenecía la candidatura y la postulación a la gubernatura al PRD, y el amigo Carlos es panista, sin embargo el golondrino oportunista Manuel Pérez Cárdenas, al no poder ser el candidato, le dejó la herencia de aspirante a Carlos Carrillo con su fantasmagórico movimiento “Llegó la Hora de Nayarit”, lo cual fué aceptado por este último a ver qué le tocaba en esta rebatinga de aspirantes. Después se les ocurrió, supuestamente al diputado Acosta Naranjo y a Carlos Carrillo, proponer y exigir por medio del Consejo Estatal del PRD, una consulta ciudadana para la selección de la candidatura de marras. Tanto el debate como la consulta tienen el trasfondo de impedir la candidatura de Martha Elena por la alianza PAN-PRD, con el propósito de sacarla de la jugada o de que la juegue vía la micro alianza PT-Convergencia, con lo cual habría tres candidaturas; la tricolor con sus comparsas PANAL y PVEM, encabezada por Gerardo, Raúl o Roberto, la alianza PAN-PRD con Naranjo seguramente a la cabeza, y la alianza PT-Convergencia abanderada por Martha Elena; con el resultado de que sin duda ganaría el tricolor hasta con Alejandro Galván de candidato.
Es muy claro para la gran mayoría de nayaritas, militantes y no militantes de algún partido, que la única figura de la oposición con posibilidades de derrotar al tricolor es Martha Elena; si Acosta Naranjo o Carlos Carrillo persisten en su exigencia de una consulta ciudadana, lo único que pasará es que se manipulará para que quede Naranjo, con el apoyo de las estructuras del PRD que él controla, y el de los priístas que, por instrucciones del cacique, se volcarán a votar por Naranjo en la consulta para que quede como candidato de la alianza PAN-PRD, asegurándose también en este caso, la victoria de cualquier candidato tricolor el día 3 de julio.
Otro escenario, tal vez no contemplado, hasta imaginario, pero no imposible, es que el CEN del PAN, no quiera aceptar como candidato a quien no sea el mejor posicionado en el ánimo de los electores, es decir a alguien que no garantice mayores posibilidades de triunfo, como serían Naranjo y Carrillo, es decir que decidiera jugar sólo y disolver la alianza, postulando a Martha Elena como candidata por el partido Azul exclusivamente, esta situación también podría generar el triunfo electoral del PAN y de Martha Elena, pero habría cuatro candidatos, el tricolor, el del PAN con Martha Elena, el PRD con Naranjo y la alianza PT-Convergencia con otro candidato; lo cual también haría muy pareja la contienda, aunque si se sumaran a esta fórmula Azul Gerardo y Raúl, podrían arrasar con el tricolor y transformar verdaderamente a Nayarit.
Por lo anterior, es menester insistir en que los aspirantes Naranjo y Carrillo tengan la suficiente grandeza política como para reconocer que Martha Elena es la única que puede llevar a la oposición al triunfo electoral el 3 de julio, ya no pierdan el tiempo en frivolidades y asuntos de ego y de poder, lleguen a acuerdos favorables para todos, son ustedes necesarios para el éxito aliancista, lo que está en juego es el futuro de Nayarit, no podemos seguir con más de lo mismo otros seis años, sobre todo si el candidato tricolor resulta ser Roberto Sandoval, aspirante favorito del autócrata.
Por el lado de los tricolores, posiblemente seguirán unidos con cualquier candidato, es su cultura, su tradición, y quizá el secreto de su larga permanecía en el poder, no importa qué tan malo sea el candidato, todos tendrán que apoyarlo, ya que no se trata de principios ni del bienestar del pueblo, sino de puros intereses de mafias políticas; si resulta ganador Roberto, seguirán el subdesarrollo, el endeudamiento, y sobre todo, la inseguridad y la violencia.
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